jueves, 30 de agosto de 2012

¿Qué debes hacer si tu bebé se cae?


¿Qué debes hacer si tu bebé se cae?

Existe la posibilidad de que los bebés se den vuelta y se caigan de la cama, del coche o carriola, del sofá, o de su sillita de comer. Cuando ya gatean y caminan, es mucho más probable que se puedan lastimar. Si bien es un momento angustiante, es indispensable que mantengas la calma y evalúes la situación con objetividad para ver si es necesario llevarlo al pediatra o si se trata de una caída que no tiene consecuencias importantes. Aquí te cuento más acera de qué debes hacer si tu bebé se cae.
Andrea le estaba cambiando el pañal a su bebita de 7 meses y en una fracción de segundo, mientras ella se agachaba a recoger una toallita del piso, su bebé se dio vuelta y cayó en el piso de madera. Andrea todavía llora cuando recuerda de ese momento. El corazón se le detuvo por un momento y pensó lo peor. Luego del pánico y de llamar a su pediatra de inmediato, Andrea pudo respirar tranquila porque a su bebita no le pasó nada más que un chichón en la cabeza.
Puede que como a Andrea, a ti te haya sucedido alguna vez que tu bebé se haya caído. Y aunque no es lo ideal, a todo el mundo le puede ocurrir un accidente. Las caídas más comunes de los bebés son desde la cama, la mesa de cambiar el pañal, el cochecito o la carriola o incluso, la sillita de comer. Es probable que si ya camina o gatea, se pueda tropezar y caer, o derribar algún objeto que pueda golpearle la cabeza. Cualquiera que haya sido la circunstancia de este tipo de accidentes, es importante tomar ciertas medidas para asegurarte de que tu bebé no haya sufrido ninguna lesión grave en la cabeza o en el resto de su cuerpo.
Dicen los que saben que los bebés parecen estar hechos de caucho, porque salen ilesos de muchas caídas que a simple vista parecían terribles. Sin embargo, es muy importante que consultes con tu médico para descartar que no hayan sufrido una conmoción cerebral (o lesión cráneo encefálica) cuando se golpean la cabeza especialmente, que requiera atención.
Si tu bebé llegara a caerse, no te angusties. Muchas caídas parecen peores de lo que son en realidad. Toma nota de lo que debes hacer:
  • Consuela a tu bebé
  • Revisa la cabecita y el cuerpo de tu bebé para ver si tiene algún moretón (magulladura, morado) o herida visible. Quítale la ropa para poder verle todo su cuerpecito. Si no le encuentras ninguna señal de alarma, es probable que no haya pasado nada. Si ves algún tipo de herida, llama de inmediato al pediatra.
Es importante aclarar que aunque no tenga ninguna herida visible en la cabeza, puede haber sufrido alguna lesión interna o lo que se conoce como conmoción cerebral. Para saber si es así, debes observar muy cuidadosamente el comportamiento de tu bebé y estar alerta a síntomas como los siguientes:
  • Pérdida de conciencia (desmayo)
  • Mareo
  • Somnolencia
  • Confusión
  • Problemas de coordinación en sus movimientos
  • Vómito
  • Irritabilidad
  • Salida de líquido transparente o con sangre de su nariz, de su boca o de sus oídos
¿Cuándo debes llamar al servicio de emergencia?
Si tu bebé se golpeó la cabeza y está sangrando, si tiene convulsiones, si perdió la consciencia (se desmayó) o está respirando de manera irregular, llama para recibir ayuda inmediata. Si sabes darle primeros auxilios (algo indispensable cuando se tienen un bebé) hazlo y no lo muevas, a menos de que haya peligro de que se lastime más si no lo haces.
Recuerda que la mejor forma de evitar que tu bebé se caiga, es tomando las medidas preventivas necesarias: amárralo bien cuando está en su silla de comer, en la mesa cambiadora de pañales o en su coche, no lo desatiendas ni por un segundo cuando está en una cama, silla o sofá; no corras ni camines con zapatos altos cuando lo tienes en brazos y crea un espacio seguro en tu casa para que tu bebé no se lastime cuando sale a explorar y a jugar en cada rincón.
Si tienes alguna pregunta acerca de las caídas de los bebés y sus posibles consecuencias, consulta con tu pediatra.

viernes, 24 de agosto de 2012

JOVENES CRISTIANOS [FUERTES Y VICTORIOSOS]


La mentalidad de ganador siempre la debo conservar en mi vida, nunca debo dejar de creer en Dios: Puesto que él me bendice, él me guía, él me fortalece, él me da todos los recursos que necesito; él abre caminos para que yo transite por ellos; él traza sendas para que yo las siga; él es soberano en mi vida y en todo lo que ocurre en derredor mío; él me consuela y fortalece, él ilumina mi senda cuando existe total oscuridad; él abre puertas cuando estas se cierran y cierra cuando también se abren y, prácticamente él pone en mi vida el querer como el hacer, todo por su voluntad.

El secreto para ser un joven fuerte y victorioso es el siguiente:

LA PALABRA PERMANECE EN ELLOS

A través de la palabra conocen más a Dios, el conocimiento es veraz, es contante y seguro, del gr. méno= posar, permanecer, quedarse, morar, estar, esperar, vivir, persistir, perdurable, permanente, perseverar, durar, retener.
La juventud cristiana se destaca porque atesora la Palabra en su alma. Sí, son jóvenes que aman la lectura, el estudio, la enseñanza de la Palabra en sus actividades personales y departamentales. Jóvenes que son conscientes que ninguna actividad de su grupo significa tanto si no se da tiempo a compartir la Palabra.

No les cansa, no les aburre, no les parece perdedera de tiempo y tampoco algo infructuoso el escuchar lo que Dios tiene para sus vidas a través de un estudio, una predicación, un consejo, una dinámica. Saben que al saber más de la Palabra, conocen más a Cristo. Su amor por él crecerá notablemente y sus vidas serán transformadas.

Nunca les parece algo anticuado, ya que no va con la iglesia actual, una iglesia que canta más que lo que predica y/o enseña. Por el contrario, les parece aun pertinente, actual, viva, poderosa y transformadora.

Una juventud que se caracteriza por trabajar para que las verdades de la Palabra permanezcan en su vida.


UNA JUVENTUD FUERTE

Mental. La mentalidad de ganador está siempre en su vida aunque el panorama sea negro, aunque los resultados no sean los esperados, no importa lo exterior lo que importa es que el interior esté fortalecido.
Emocional. Mentalidad de ganador, al menos le permite no sentirse nunca fracasado, frustrado y decepcionado, sino que le ayuda a sentir y vivir como todo un campeón, que ha ganado un partido, un torneo y hasta un campeonato.
Volutiva. La diferencia entre empezar y terminar bien un día, y, todos los días, es la actitud que asume para vivirlo. Sentirse como toda persona que ha logrado el éxito, que ha adquirido un gran triunfo y que está listo para empezar con mucho mayor ímpetu cada vez, un nuevo día de su vida.
Alma. Que su ser interno esté en una comunión real, viva y personal con Dios. Lo que importa es cómo experimenta y vive la paz del Señor en su alma; cuánto conoce más del Señor; qué tan cerca se encuentra de él en comparación a antes de iniciar algún proyecto o el nuevo día.
Comunión con Dios. La mentalidad triunfadora depende en un cien por ciento de la Presencia de Dios en su vida. Depende de cómo dicha presencia le ayuda a madurar, a crecer, a fortalecerse y a ser un hombre o una señorita lleno de fe, confianza y decidido (a) a dar un nuevo intento a mi vida.

JUVENTUD VENCEDORA

No ama el mundo y lo que en el mundo hay. Su amor es por Dios.
Sabe que lo que hay en el mundo es pasajero, es temporal, pero lo espiritual es eterno. Acepta que la comunión con el mundo es enemistad con el Señor.

No ama al mundo. Porque reconoce que todo lo que el mundo ofrece es vano.
No importa que sea agradable a los ojos, que su mirada sea atraída y seducida por lo que esta vida ofrece, ellos, son una juventud que ama mucho más a Dios que lo que el mundo ofrece.

Tampoco importa que el mundo trate de atraerlos con tentaciones que atrapen su carne. Sí, el diablo, el pecado y el mundo colaboran juntos para atrapar en sus redes a la juventud cristiana (y a los no tan jóvenes). Alcohol, drogas, baile, cine, vestimenta ligera, espectáculos pornográficos y, muchas tentaciones más. Pero la juventud cristiana ama más a Dios.

El mundo también quiere vencer y derrotar a la juventud cristiana a través del pensamiento, la filosofía, el arte, la ciencia y la religión universal. Pero el joven cristiano detecta cuando el mundo se ha infiltrado en esas categorías y las rechaza para mantenerse lleno de amor y con una comunión firme con Dios.

El maligno, por medio del mundo siempre va a querer derrotar a la juventud cristiana. La ataca de una manera, a veces feroz, pero también, de una forma sutil, discreta, que la confunde.
Pero Dios ha provisto los medios suficientes para que la juventud lo ame y esté en una comunión excepcional con él. Su Espíritu Santo y la Palabra.
Sin embargo, es el propio joven y la señorita quienes deciden ganar o perder. Son ellos quienes se hacen fuertes espiritual, mental, emocional y físicamente para derrotar a su enemigo o deciden rendirse ante el mundo y ser derrotados.
¡La decisión es tuya, joven amigo!

Hermilo Rojo Venegas

JOVENES CRISTIANOS [FUERTES Y VICTORIOSOS]


La mentalidad de ganador siempre la debo conservar en mi vida, nunca debo dejar de creer en Dios: Puesto que él me bendice, él me guía, él me fortalece, él me da todos los recursos que necesito; él abre caminos para que yo transite por ellos; él traza sendas para que yo las siga; él es soberano en mi vida y en todo lo que ocurre en derredor mío; él me consuela y fortalece, él ilumina mi senda cuando existe total oscuridad; él abre puertas cuando estas se cierran y cierra cuando también se abren y, prácticamente él pone en mi vida el querer como el hacer, todo por su voluntad.

El secreto para ser un joven fuerte y victorioso es el siguiente:

LA PALABRA PERMANECE EN ELLOS

A través de la palabra conocen más a Dios, el conocimiento es veraz, es contante y seguro, del gr. méno= posar, permanecer, quedarse, morar, estar, esperar, vivir, persistir, perdurable, permanente, perseverar, durar, retener.
La juventud cristiana se destaca porque atesora la Palabra en su alma. Sí, son jóvenes que aman la lectura, el estudio, la enseñanza de la Palabra en sus actividades personales y departamentales. Jóvenes que son conscientes que ninguna actividad de su grupo significa tanto si no se da tiempo a compartir la Palabra.

No les cansa, no les aburre, no les parece perdedera de tiempo y tampoco algo infructuoso el escuchar lo que Dios tiene para sus vidas a través de un estudio, una predicación, un consejo, una dinámica. Saben que al saber más de la Palabra, conocen más a Cristo. Su amor por él crecerá notablemente y sus vidas serán transformadas.

Nunca les parece algo anticuado, ya que no va con la iglesia actual, una iglesia que canta más que lo que predica y/o enseña. Por el contrario, les parece aun pertinente, actual, viva, poderosa y transformadora.

Una juventud que se caracteriza por trabajar para que las verdades de la Palabra permanezcan en su vida.


UNA JUVENTUD FUERTE

Mental. La mentalidad de ganador está siempre en su vida aunque el panorama sea negro, aunque los resultados no sean los esperados, no importa lo exterior lo que importa es que el interior esté fortalecido.

Emocional. Mentalidad de ganador, al menos le permite no sentirse nunca fracasado, frustrado y decepcionado, sino que le ayuda a sentir y vivir como todo un campeón, que ha ganado un partido, un torneo y hasta un campeonato.

Volutiva. La diferencia entre empezar y terminar bien un día, y, todos los días, es la actitud que asume para vivirlo. Sentirse como toda persona que ha logrado el éxito, que ha adquirido un gran triunfo y que está listo para empezar con mucho mayor ímpetu cada vez, un nuevo día de su vida
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Alma. Que su ser interno esté en una comunión real, viva y personal con Dios. Lo que importa es cómo experimenta y vive la paz del Señor en su alma; cuánto conoce más del Señor; qué tan cerca se encuentra de él en comparación a antes de iniciar algún proyecto o el nuevo día.

Comunión con Dios. La mentalidad triunfadora depende en un cien por ciento de la Presencia de Dios en su vida. Depende de cómo dicha presencia le ayuda a madurar, a crecer, a fortalecerse y a ser un hombre o una señorita lleno de fe, confianza y decidido (a) a dar un nuevo intento a mi vida.

JUVENTUD VENCEDORA

No ama el mundo y lo que en el mundo hay. Su amor es por Dios.
Sabe que lo que hay en el mundo es pasajero, es temporal, pero lo espiritual es eterno. Acepta que la comunión con el mundo es enemistad con el Señor.

No ama al mundo. Porque reconoce que todo lo que el mundo ofrece es vano.
No importa que sea agradable a los ojos, que su mirada sea atraída y seducida por lo que esta vida ofrece, ellos, son una juventud que ama mucho más a Dios que lo que el mundo ofrece.

Tampoco importa que el mundo trate de atraerlos con tentaciones que atrapen su carne. Sí, el diablo, el pecado y el mundo colaboran juntos para atrapar en sus redes a la juventud cristiana (y a los no tan jóvenes). Alcohol, drogas, baile, cine, vestimenta ligera, espectáculos pornográficos y, muchas tentaciones más. Pero la juventud cristiana ama más a Dios.

El mundo también quiere vencer y derrotar a la juventud cristiana a través del pensamiento, la filosofía, el arte, la ciencia y la religión universal. Pero el joven cristiano detecta cuando el mundo se ha infiltrado en esas categorías y las rechaza para mantenerse lleno de amor y con una comunión firme con Dios.

El maligno, por medio del mundo siempre va a querer derrotar a la juventud cristiana. La ataca de una manera, a veces feroz, pero también, de una forma sutil, discreta, que la confunde.
Pero Dios ha provisto los medios suficientes para que la juventud lo ame y esté en una comunión excepcional con él. Su Espíritu Santo y la Palabra.
Sin embargo, es el propio joven y la señorita quienes deciden ganar o perder. Son ellos quienes se hacen fuertes espiritual, mental, emocional y físicamente para derrotar a su enemigo o deciden rendirse ante el mundo y ser derrotados.
¡La decisión es tuya, joven amigo!

Hermilo Rojo Venegas

Chateando con Dios


Muchas personas me preguntan: “¿cómo nos habla Dios? ¿Existe alguna dirección donde pueda darle click? O tal vez, ¿algún locutorio para comunicarme con Él? ¿Está en una sola iglesia? ¿O por qué tengo que ir a la iglesia para encontrarme con Dios? ¿Acaso tengo que salir con una antena en mi cabeza para entrar en contacto con Él? ¿A lo mejor debo encender en el cable de mi televisor un canal específico?”.

Todos decimos: “¡Quiero oír a Dios! ¿Habla con voz audible? ¿Su voz es ronca? ¿Viene en la noche y me susurra al oído? ¿Me puede hablar por medio de un animal o escribiendo en la pared como lo hizo en el Antiguo Testamento?”.

Y lo que realmente sucede es que, a veces no comprendemos que Dios nos habla desde que nacemos y que todavía continúa haciéndolo. El más grande placer para Él es tener contacto con nosotros… chatear con nosotros. Fíjate que no es rezar sino chatear. Rezar no, porque es repetir una frase sin sentirla… Lo que debemos hacer es chatear cada día con Él y no olvidarnos de añadirlo a nuestros contactos como uno de nuestros Favoritos.

Él es tan maravilloso que nos dice en su Palabra: “… les responderé antes que me llamen. Cuando aún estén hablando de lo que necesiten, ¡me adelantaré y responderé a sus oraciones!” Isaías 65:24NTV ¡Qué tal cuidado y cuánto nos ama Dios que responde incluso antes que nosotros lo llamemos!

Él responde a nuestras oraciones, nos habla a través de su Palabra. También lo hace por medio de pensamientos, ideas, o visiones que has mantenido en tu mente, nos habla a través de letreros por las calles, a través de tus padres, de tus pastores, de tus amigos… Él utiliza millones de métodos creativos para estar conectado contigo, incluso este blog ya estaba dentro de sus planes.

Ahora, si no estás claro en su voz, puedes pedirle que te revele los deseos más profundos que Él ha puesto dentro de ti.
No seas de esas personas que llaman a la línea de los psíquicos, como la de Josie Diez Canseco, para que otros le digan su futuro porque “El Señor está cerca de todos los que lo invocan, sí, de todos los que lo invocan en verdad. Él concede los deseos de los que le temen; oye sus gritos de auxilio y los rescata” Salmo 145:18NTV 

Dios responde nuestras llamadas, aunque no lo creas, mucho más rápido que el 911. Él está atento las 24 horas del día… los 7 días de la semana, en las madrugadas o en horas inoportunas, a tus gritos de auxilio. Recuerda que no es tu almohada, la única que sabe de tus lágrimas. Él te mira mientras duermes y siempre está dispuesto a rescatarte, sin importar cuán profundo sea el hoyo en el que estés metido. 
Lo malo es que algunos cristianos han dejado de estar en línea y de escuchar a Dios cada día. Simplemente ubican su dedito en la Biblia y al azar dicen: “Está será la palabra que hoy sustente mi día”. Otros van de reunión en reunión, pidiendo a los hombres que oren por ellos en relación a su futuro…

Yo prefiero mil veces que Dios me hable en mi casa a solas, a que delante de toda la iglesia se oiga: “Tú, Wenddy, ven aquí… Hoy dios tiene una palabra para ti” porque recuerden que Dios usó a los profetas para hablarle al pueblo terco, a los necios, a los que no comprendían a la primera los propósitos de Dios…

No entendiendo esto como que Dios les ha dado su palabra directamente a ellos… pues recuerden que el único mediador entre Dios y los hombres, es Jesucristo hombre… Un profeta puede CONFIRMAR tu visión pero él o ella no podrán darte el rumbo de tu vida. Eso sólo te lo da Dios: “Pero este es el nuevo pacto que haré con ustedes - dice el Señor- Pondré mis instrucciones en lo más profundo de ellos y las escribiré en su corazón. Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo” Jeremías 31:33NTV

Dios está dispuesto a escribirte día a día, Dios está dispuesto a tomarse un café contigo cada mañana. A mí me dice muchas cosas, ¿qué te dice a ti? Puedes colocarlo en este blog, hagamos que nuestro Dios tenga más fans que el Facebook, que el Google o que el Twitter… Que nuestro primer suspiro sea para Él, que al despertarnos cada mañana, lo primero que hagamos sea chatear con Él… Es tiempo de buscar razones para estar en línea con Él.

Wenddy Neciosup

XTREME KIDS - BRILLA EN MI - (album BRILLA EN MI)

MUSICA CRISTIANA INFANTIL.¨que toodos los NIÑOS lo ALABEN¨.

NO vivas más en el [PANTANO]


“Un pájaro que vivía resignado en un árbol podrido en medio del pantano, se había acostumbrado a estar ahí, comía gusanos del fango y se hallaba siempre sucio por el pestilente lodo.

Sus alas estaban inutilizadas por el peso de la mugre, hasta que cierto día un gran ventarrón destruyó su guarida; el árbol podrido fue tragado por el cieno y el se dio cuenta de que iba a morir.

En un deseo repentino de salvarse, comenzó a aletear con fuerza para emprender el vuelo, le costó mucho trabajo porque había olvidado como volar, pero enfrentó el dolor del entumecimiento hasta que logró levantarse y cruzar el ancho cielo, llegando finalmente a un bosque fértil y hermoso.”
Los problemas son como el ventarrón que ha destruido tu guarida y te están obligando a elevar el vuelo o a morir.

Nunca es tarde. No importa lo que se haya vivido, no importan los errores que se hayan cometido, no importa las que se hayan dejado pasar, no importa la edad, siempre estamos a tiempo para decir ¡BASTA!, para sacudirnos el cieno y volar ALTO y muy lejos del pantano.

Me salvó de la fosa mortal, me libró de hundirme en el pantano.
Afirmó mis pies sobre una roca; dio  firmeza a mis pisadas.

Cash Luna - Predica sobre Noviazgo (Completo) 2012

El Arco iris, promesa de Dios de Avanza Kids

El hombre y los pajaritos para niños cristianos www.avanzakids.com

Reflexión: Mi amigo, el Dueño del Universo



Jesús es el Hijo de Dios. Dios es la persona que dirige todo el universo. ¿Qué grande parece eso verdad? Y es así. Es real.
Dios es quien dirige todo el universo y tiene un hijo que se llama  Jesús y Jesús  quiere ser tu amigo.

Dios no solo dirige todo el universo, sino que también lo creo. Creo todo el firmamento, es decir el cielo con  sus millones de estrellas, galaxias, soles y lunas que ni con un telescopio enorme podríamos observar. ¿Eso parece muy grande  verdad? Y es así.
Dice la Biblia,  la Palabra de Dios que “Dios es quien decide cuántas estrellas debe haber, y a todas las conoce por su nombre”. ¿Te imaginas  una persona que conozca a todas las estrellas y a cada una las conozca por su nombre? Esa persona con seguridad es maravillosa y única.

Pero hay más: Dios también es maravilloso y único por su amor.  “Dios amó tanto a la gente de este mundo que me entregó a mi, a JESÚS, que soy su único Hijo, para que todo el crea en mi no muera, sino que tenga vida eterna...” Dios es único porque ama todos. Y por supuesto,  ¡también te ama a vos! Eso es maravilloso.
Aunque  muchas veces no tomamos en cuenta a Dios y a su amor, y hacemos cosas que lo ofenden  y por lo tanto nos separan de El.

Pero Jesús el Hijo de Dios,  es tan amoroso como su Padre y quiere acercarnos a El. Por ello dio su vida para que vos tengas vida eterna, que es la clase de vida que necesitamos para vivir cerca de Dios.

Si crees que Jesús es el hijo de Dios podes tener vida eterna. Solo tenes que decírselo con estas palabras: Dios, creo que eres el creador y que me amas y creo que Jesús quiere darme la vida eterna. Amen. Qué así sea!

Ahora que hiciste esta hermosa oración te cuento un secreto: El que cuenta las estrellas y a cada las conoce por su nombre, te conoce a vos y hasta conoce el número de tus cabellos. ¿No es maravilloso?
Gabriela.

A mi corazón también llegó la primavera…


Los días ya nos parecen más largos. El sol nos deja jugar un poquito más por la tarde. Escuchamos cantar a los pájaros desde muy temprano en la mañana.
Las flores, ¡si!  Las flores están mostrando sus más bellos colores...
¿Qué está sucediendo entonces? Amigos, la primavera está haciendo su entrada.
¡Qué hermosa es la primavera!, ¿verdad?

La primavera como el resto de las estaciones tiene un único Creador y ese es Dios.
Dios no solo ha creado esta bella estación del año para que la disfrutemos sino todo
lo que vemos en la naturaleza. La Biblia nos dice que: Dios creó todo lo que hay en
 el cielo y en la tierra, lo que puede verse y lo que no se puede ver.  Los hermosos
pájaros y las palomas, pero también las flores y todos los árboles frutales, Dios los creo...
Pero alguna vez te pusiste a pensar qué Dios también fue quien te creo a vos mismo. Tus ojos, tu cabello, todo tu cuerpo, tu corazón y sus latidos, todo fue creado por Dios y lo hizo de una manera especial. 

Pero aunque Dios te creo especial, a veces ni te acordas de eso o simplemente paso que nadie te lo había dicho. Como tal vez nadie te dijo que a Dios no le agrada que hagamos cosas malas, como mentir, desobedecer a nuestros padres y maestros, o tener pensamientos malos y que todas esas actitudes nos separan  de Dios.
Pero a no desalentarse, y menos en días primaverales. Dios tiene para vos una hermosa noticia y es que Jesús, Su Hijo  quiere ser la persona que te lleve a  disfrutar  de la amistad con Dios, y no solo en esta primavera sino en toda tu vida.
La Biblia nos muestra estas palabras de Jesús: -Yo soy el camino, la verdad y la vida. Sin mí, nadie puede llegar a Dios el Padre.

Lo que tenés que hacer es creer y aceptar en tu corazón a estas palabras de Jesús.
Si lo crees, ahora mismo debes decírselo: “Querido Dios acepto a Jesús en mi corazón porque creo que es el único camino que me lleva a vos. Amen”. ¡Qué así sea!
Ahora que hiciste esta oración sos un hijo de Dios, el libro de Dios, la Biblia dice que “a todos los que le recibieron a los que creen en su nombre, les dio el poder de ser llamados hijos de Dios”.
Vamos corre a contárselo a quien te regalo la revista y... a mi también! 

Gabriela

Como nació el Señor Invierno


material cristiano
Hace mucho, pero mucho tiempo, cuando ninguna estación del año había aparecido en nuestro  planeta,  el Sr. Invierno ya estaba preparándose para su llegada.

Es que al Sr. Invierno le gusta llegar contento a todos los rincones de la Tierra y repartir ricos  chocolates y chocolatadas a todos los niños del mundo.

Pero, aunque a él le gustaba repartir alegrías a todos, no tenía a quién entregarlas, porque aún no había vida en este mundo.
Fue así como el Creador de las estaciones lo vio tan contento que pensó que sería hora de iniciar el largo viaje de las queridas estaciones  del año...

Para ello, el Creador pensó que primero debía preguntarle a los amigos: Don Otoño, Doña Primavera y Don Verano si querían acompañarlo en esta marcha.

Como todos eran muy buenos compañeros no tuvieron problemas y  comenzaron a dejar pasar su tiempo para que Don Invierno apareciera y mientras que las estaciones pasaban
Don Invierno se ocupaba de preparar una gran fiesta  blanca para todos los habitantes de la Tierra.

Fue entonces que preparó  nieve en gran cantidad para jugar con todos los niños del mundo.
Pero como en toda fiesta, no faltaron  ni las tortas riquísimas  ni los  chocolates de todos los colores.

Además repartió bufandas abrigadas y coloridas; y gorros y guantes calentitos para todo el mundo.
Don Invierno también  se ocupo de hacerse  muy amigo de Don Sol para que cuando la  nieve helada  caiga del cielo, el sol caliente a todos.

Fue entonces que el Creador le dijo: -¡Ahora sí amigo Invierno, te dejo que vayas al mundo a conocer a todos los niños y a alegrarlos con tu llegada!

Desde ese día cada año, el 21 de junio, nuestro amigo invierno, llega cargado de frío, nieve, chocolates y muchas, muchas cosas más...

Disfrútalo!
Mientras Dios admiraba tal belleza, cayó la noche y llegó la mañana. Ese fue el tercer día.

Dijo entonces el Creador: “Quiero que haya en el cielo luces que separen el día de la noche,
luces que indiquen las estaciones, los días y los años, luces en el cielo azul que iluminen la tierra...
Génesis 1: 13-14 (L.A)
Gabriela.

es t r e l l a s

 t r e l l a s

estrellasestrellasestrellas
Existían millones de estrellas en el cielo.
Estrellas de todos los colores, blancas, plateadas, verdes, dorados, rojas, azules...
Un día inquietas, ellas se acercaron a Dios y le dijeron:
_Señor Dios, nos gustaría vivir en la Tierra entre los hombres.
_Así será hecho, respondió el Dios. Las conservaré a  todas ustedes pequeñitas, como son vistas para que puedan bajar a la Tierra.
Se cuenta que en aquella noche, hubo una linda lluvia de estrellas.
Algunas de acurrucaron en las torres de las iglesias, otras fueron a jugar y correr junto con las luciérnagas por los campos, otras se mezclaron con los juguetes de los niños...
Y la tierra quedó maravillosamente iluminada...
Pero con el pasar del tiempo, las estrellas decidieron abandonar a los hombres y volver al cielo, dejando a la Tierra oscura y triste.
_ ¿Por qué volvieron? Preguntó Dios a medida que las estrellas iban llegando al cielo.
_ Señor, no nos fue posible estar en la Tierra, allí hay muchos cosas malas y la gente se pelea, hay guerras, mucha maldad y muchas personas mueren sin saber nada de Ti.
Y  Dios les dijo:_ ¡Claro! El lugar de ustedes es aquí en el Cielo, este es el lugar que yo hice para ustedes. En la Tierra viven los hombres y las mujeres, los niños y las niñas, los jóvenes y los ancianos.
El Cielo, es mi casa y el lugar donde   ustedes tienen que estar. Porque el cielo, es  el lugar de lo perfecto, de lo que no tiene mancha, de lo que cambia, aquí todo es hermoso...
Después que llegaron las estrellas, Dios las contó una por una... Y luego con una voz distinta dijo: Aquí no están todas, aquí falta una, ¿qué paso que no están todas?
Las otras estrellas se miraban entre ellas hasta que un ángel le dijo a Dios:
_ Señor, una estrella quiso quedarse entre las personas que viven en la Tierra. Ella descubrió que su luz ayudaba a las personas, alegraba las noches, los días,  los campos, las plazas y muchos lugares donde había mucha gente sin alegría ni paz... 
A Dios le gustó mucho escuchar sobre eso y le regalo a aquella valiente  estrellita que se había quedado en la Tierra una luz más grande y brillante, para que pudiera iluminar a todas las personas que ella quisiera...
Jesús volvió a hablarle a la gente:
--Yo soy la luz que alumbra a todos los que viven en este mundo.
Síganme y no caminarán en la oscuridad, pues tendrán la luz que les da vida. (Juan 8:12)
Gabriela.

La historia de Ramiro cuentos cristianos Avanzakids.com

miércoles, 15 de agosto de 2012

Sueño Seguro para los bebés - Como Acostar a su Bebé a Dormir de Manera ...

LO QUE LE PASA A UN NIÑO SIN CINTURON DE SEGURIDAD!!!!!

Piscina Segura: medidas preventivas

Vídeo para niños que les enseña normas de seguridad en la piscina

Seguridad de Fuego para Los Niños Pequeños - Fire Safety

Accidentes en casa

Seguridad en el Hogar

Seguridad en el hogar:precauciones con los productos de aseo www.facem...

Bebés: Seguridad en Casa

El Hipo

Bebés: Visita al Doctor

Bebés - Seguridad al Aire Libre

Tu bebé: ¿Que debes saber a la hora de dormir?

¿Cómo puedes saber si tu bebé está tomando suficiente leche materna?


Con el nacimiento de tu bebé, empieza un nuevo y hermoso reto: alimentarlo para que crezca sano y fuerte. La leche materna es el alimento ideal para un recién nacido, así que puedes estar tranquila de que está recibiendo la mejor nutrición. Sin embargo, muchas mamás se preguntan si su bebé está tomando suficiente leche. ¿Cómo puedes saber? Aquí te cuento.
Los nueve meses de espera han terminado y por fin tienes a tu nuevo amor en tus brazos. Ese bebé, niño o niña, es la razón de tu vida y te necesita 100% para crecer y alimentarse. Tu cuerpo, perfectamente diseñado para la maternidad, tiene la leche que él o ella necesita para alimentarse y crecer fuerte y sano(a).
Sin embargo, amamantar puede parecer un reto para muchas madres primerizas, pues como todo, la lactancia tiene su “ciencia” y hay que aprender a entender el proceso y tener paciencia. Digamos que es una especie de “danza” entre tú y tú bebé. Poco a poco se irán acoplando el uno al otro y con el tiempo verás que amamantar te trae inmensas satisfacciones y crea un vínculo hermoso entre ustedes. (¡Eso sin contar que es la manera más fácil y práctica de alimentarlo(a)!)
Pero como siempre surgen dudas, tal vez te preguntes cómo puedes saber cuánta leche necesita tu bebé. Es probable que otras madres que no amamantaron y le dan a su bebé leche de fórmula, hablen de que él o ella toman determinado número de onzas en cada sesión de alimentación. Pero cuando estás amamantando, es imposible ver cuánta leche toma tu chiquitín. A menos que haya una cámara infrarroja, es algo que no se puede medir a simple vista.
Por eso, lo principal es que estés alerta a las señales que da tu bebé. Más allá de los horarios, él o ella te dará las claves para indicarte si tiene hambre y si está satisfecho(a). Cada dos horas es el promedio para un recién nacido, pero eso puede variar de un bebé a otro. Por eso, si lo amamantaste y al rato indica que quiere más, no lo cuestiones. Su estómago es tan pequeñito, que necesita de tu leche muy seguido. Esto irá cambiando a medida que crece; pero ahora necesita que lo alimentes con frecuencia para estar feliz y crecer fuerte. Entre 8 y 12 veces al día, es lo ideal para las primeras semanas de vida.
Por lo general, tu bebé se alimentará bien (si no hay problemas como la mala posición del bebé al amamantar), pero en ocasiones, puede que no esté tomando toda la leche que necesita y esto puede causar problemas. Ten en cuenta lo siguiente para saber si tu bebé está alimentándose como debe ser:
  • Tus senos deben sentirse suaves luego de cada sesión, puesto que el bebé vacía la leche que hay en ellos.
  • Tu bebé se ve relajado(a) y satisfecho(a) luego de alimentarse.
  • Observa cuántas veces orina. Durante los primeros días de vida, cuando recibe el nutritivo calostro (la primera leche, que está llena de anticuerpos e inmunoglobulina que ayudan a proteger al bebé de virus y bacterias y además, a eliminar los deshechos fecales conocidos como meconio), tu bebé mojará de uno a dos pañales. Pero cuando te “baja la leche” tu bebé mojará de 6 a 8 pañales de tela o de 5 a 6 desechables.
  • Observa cuántas deposiciones (evacuaciones) tiene: Durante el primer mes, tu bebé ensuciará el pañal por lo menos 3 veces al día. Las primeras deposiciones son oscuras, casi negras, pero para el quinto día de nacimiento se vuelven color mostaza. A medida que crece, tu bebé puede tener una deposición al día. Pero cada bebé es diferente, así que ten esto en mente. Lo importante es que haya heces fecales pues indican que está comiendo suficiente.
  • La mayoría de los bebés pierden entre el 5 y el 9 por ciento de su peso al nacer durante los primeros días, pero lo vuelven a ganar al cumplir 2 semanas de nacidos. Si tu bebé perdió peso y lo recuperó y sigue subiendo de peso, está bien alimentado. Para que te des una idea, durante el primer mes tu bebé debe aumentar entre 5 y 10 onzas a la semana; a los dos y tres meses, aumentará entre 5 y 8 onzas; entre los tres y seis meses ganará entre 2.5 y 4.5 onzas semanalmente y a partir de los seis meses hasta que cumpla un año, debe aumentar de 1 a 3 onzas a la semana.
¿Cómo puedes darte cuenta de que tu bebé tiene hambre? Él o ella te dará señales que indican que está listo(a) para comer.
En la fase temprana del hambre, se golpea los labios o los chupa; abre y cierra la boca; chupa sus manos, dedos, pies, juguetes o su ropa.
En la fase activa del hambre, tu bebé puede adoptar la posición de amamantar, acercarse a tu pecho, halar tu ropa, pegarte en el brazo o en el pecho repetidamente, estar irritable y respirar rápido.
En la fase tardía del hambre (es decir, cuando ya no puede esperar más), tu bebé se mueve la cabeza de lado a lado con fuerza y ¡llora!
Así que si está llorando, es porque es muy tarde. ¡Tu bebé ya tiene mucha hambre!
Recuerda que la leche materna es ideal para tu bebé desde que nace hasta que cumple dos años. Cuánto tiempo decidas amamantarlo depende de ti, pero lo que sea, por poco que parezca, es muy valioso para su salud.
No olvides que a medida que tu bebé crece sus necesidades de alimentación van cambiando, pues a partir de los 6 meses puedes empezar a complementar la leche materna con algunos sólidos. Siempre es importante que consultes con su pediatra antes de iniciar cambios en la alimentación.
Cualquier duda que tengas sobre la lactancia o la alimentación de tu bebé, consulta a tu médico. También puedes consultar a los especialistas en lactancia que pueden ayudarte si tienes algún problema para amamantar. En la mayoría de los casos se puede solucionar y te permitirá darle a tu bebé la alimentación más completa con todo tu amor

¿Es aconsejable usar protector solar en la piel de tu bebé?


Una de las preguntas más frecuentes que surgen cuando tienes un bebé es cómo protegerlo del sol. Su delicada piel merece un cuidado especial, así que es probable que pienses que lo mejor es aplicarle un protector solar para evitar las quemaduras de los rayos ultravioleta o UV. Sin embargo, es importante que tengas la información correcta y completa: El protector solar no es adecuado para los bebés de cierta edad. Aquí te explico por qué.
Liliana vive en una ciudad junto al mar y hace cuatro meses que tuvo una linda bebita. A Liliana le encantan la playa y el sol, y aunque quiere llevar a su bebé a disfrutar con ella, tiene una duda muy común entre las madres, especialmente las primerizas: ¿Cómo debe proteger y cuidar la piel de su bebé del sol?
Aunque pueda parecer que la respuesta obvia sea “aplicándole protector solar”, no creas que es la adecuada.  La verdad es que la piel de los bebés es muy delgada y delicada, por lo cual absorbe rápidamente los químicos presentes en los protectores y en los bloqueadores solares. Esto incrementa los riesgos de una reacción alérgica y de inflamación.
Los pediatras de la Administración Federal de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, aconsejan que lo mejor es evitar que los bebés menores de 6 meses se expongan al sol. Especialmente, al igual que con los adultos, entre las 10 am y las 2 pm, cuando los rayos ultravioleta son más intensos y dañinos.
Entonces, ¿qué debes hacer? La mejor protección para la piel de tu bebé es que lo dejes en la sombra. Si no es posible que encuentres sombra en el lugar donde te encuentras, puedes crearla con una carpa o parasol. Incluso puedes usar el parasol del coche o de la carriola.
Es recomendable además que vistas a tu bebé con pantalones sueltos y camisetas de manga larga, además de un sombrero (no gorras, ya que éstas no ofrecen la misma protección para el cuello) para resguardar su cabecita y su cuello del sol.  Usa colores claros (reflejan la luz y no la absorben) y algodón para mantener al calor alejado de tu bebé. Recuerda que los pequeños todavía no han desarrollado bien el “termostato” de su cuerpo, por lo cual no sudan de la misma manera que los adultos para refrescar a su cuerpo y esto puede hacer que se acaloren demasiado.
No olvides mantener a tu bebé hidratado(a) cuando estés afuera, aunque sea en la sombra. El sol hace que se deshidraten rápidamente así que amamántalos con frecuencia o dales su leche de fórmula para mantener la hidratación. La leche materna contiene el agua que tu bebé necesita y la leche de fórmula también se prepara a base de agua. Sin embargo, darle un poco de agua cuando estás en el sol, no está de más.
Si acaso no hay sombra disponible, puedes aplicarle una pequeña cantidad de bloqueador con factor de protección de mínimo 15. No le apliques protector solar con DEET (repelente de insectos), pues no es recomendable para los niños muy pequeños Ponle ropa clara que lo cubra, hidrátalo, y mantente alerta a las señales de quemadura o deshidratación: irritabilidad, enrojecimiento y llanto excesivo.
Si llegaras a notar estos signos retira inmediatamente a tu bebé del sol y aplícale compresas frías en la zona afectada. No dejes de hidratarlo, una buena medida es fijarte cuánto ha orinado. Si es menos de lo normal, continúa amamantándolo, dándole su leche y agua. De cualquier manera, si te preocupas o te alarmas, debes consultar a tu médico para evitar cualquier complicación debido a quemaduras o deshidratación.
Por eso, la exposición al rayo del sol no es saludable para los bebés, en especial para los recién nacidos, también evita exponer a tu pequeñito(a) a las altas temperaturas del verano. Busca la sombra o sal antes de las 10 AM y cuando ya va a caer el sol. Recuerda que su piel es delicada y necesita un cuidado muy especial. Si tienes dudas respecto a cómo proteger la piel de tu bebé consulta con tu pediatra.

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